Trastorno por déficit de atención e hiperactividad en mujeres.

 Esta entrada en la que se habla acerca del trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) en mujeres, tiene dos motivos, el primero, es la reciente lectura que hice de un libro sobre el TDAH, en el cual se dedicó un capítulo a este trastorno y cómo afecta a las mujeres en las diferentes etapas de la vida, incluyendo las consecuencias que se pueden presentar a lo largo de la vida al no ser identificada y tratada en edades tempranas. Luego, el que soy una mujer con TDAH que al leer el libro y el capítulo se vio plenamente identificada.

En libro mencionado anteriormente, el autor Bauermeister (2014) indicaba que hasta ese momento:

“la investigación científica del TDAH se había concentrado casi en su totalidad en varones. Por consiguiente, es muy poco lo que sabemos de las niñas hispanas con esta condición” (p. 263).  

El autor no indica las razones por la que las investigaciones se han centrado en varones, pero, reconoce que la falta de estudios impide que los diversos profesionales en educación identifiquen el trastorno en las niñas.


En esta entrada no se profundiza en el TDAH, pero, les invito a leer y conocer un poco más del trastorno en la entrada el blog Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH)en la que se explica un poco acerca del mismo. Pero, me parece significativo recordar que el TDAH se define según el Manual Diagnostico y Estadístico de los Trastornos Mentales (5ª edición de la Asociación Americana de Psiquiatría., 2013):

 “por niveles problemáticos de inatención, desorganización y/o hiperactividad-impulsividad.” (p. 32).

La definición anterior se puede ampliar con lo que expresan las autoras Franquiz y Ramos (2015) al indicar que el TDAH:

 “se determina por un nivel de atención, concentración, actividad motora e impulsividad inadecuados para el nivel de desarrollo.” (p. 34).

 Las personas ya sean niños, niñas, adolescente o adultos que presentan TDAH, muestran comportamientos como:

  •          Dificultad para mantener la atención en tareas o actividades, sean estas académicas o cotidianas.
  •          En ocasiones no prestan atención cuando se les habla o cuando reciben instrucciones.
  •          Pierden sus pertenecías fácilmente, nunca recuerdan donde las colocaron o coloquialmente donde las dejaron puestas.
  •          Se les dificulta permanecer sentados, por lo que se mueven constantemente en su asiento.
  •          Dificultad para esperar su turno.
  •          Se les dificulta seguir las instrucciones.

            Los anteriores son rasgos generales que pueden variar de una persona a otra y se utilizan como un ejemplo, en el Manual Diagnostico y Estadístico de los Trastornos Mentales DSM-5, se encuentran una serie de características o síntomas de inatención, desorganización, hiperactividad e impulsividad que debe mostrar la persona para ser diagnosticada con TDAH.    


Diagnostico en niñas

Al investigar acerca del diagnóstico en las niñas encontré que las autoras Franquiz y Ramos, (2015) consideran que:

 “los niños y niñas con TDAH presentan diferentes patrones de comportamiento. Las niñas tienden a presentar mayor inatención y los niños, mayor componente de hiperactividad-impulsividad” (p. 4).

Lo expresado por las autoras es de suma importancia, debido a que esta puede ser la razón por la que no se diagnostique y trate de forma temprana a las niñas o en casos extremos que no se dé un diagnóstico.

Lo anterior es justificado por las autoras Mena, Nicolau, Salat, Tort y Romero (2006) al argumentar que los rasgos del TDAH en niños y niñas varia de la siguiente forma, en los niños:

un mayor grado de hiperactividad-impulsividad que las niñas, lo que conlleva conductas molestas, desorden, falta de pulcritud, comportamientos impulsivos-agresivos con los compañeros, pudiendo incluso llegar a enfrentarse con el maestro o profesor.  Estas conductas preocupan tanto a padres como a maestros y, por ello, se suele solicitar una consulta, por lo que se diagnostica con mayor facilidad. (p. 3)

  Las anteriores son características propias de un niño que presenta TDAH, no permanece sentado en clase por lo que es regañado constantemente, juega de forma brusca con sus compañeros o parientes de la misma edad, toma decisiones de forma impulsiva. Como se alude en la cita las conductas mostradas por el niño facilita el diagnóstico, sin embargo, en las niñas:

a menudo presentan más problemas de rendimiento académico, sintomatología ansiosa o depresiva y no acostumbran a mostrar conductas molestas. En estos casos la detección del trastorno es más difícil, aunque el coste personal, escolar y familiar puede ser muy elevado; incluso con buenas capacidades pueden presentar fracaso escolar, hecho que distorsiona la relación con el maestro y con la familia. (Mena, Nicolau, Salat, Tort y Romero, 2006, p. 4)

Lo anterior evidencia que la conducta que muestran las niñas con TDAH provoca que el trastorno pase desapercibido. La información anterior es valiosa para comprender porque se le dificulta a los padres y docentes identificar el trastorno en las niñas.

Otro punto por considerar es que en muchas ocasiones se incurre en el error de asociar el comportamiento que presenta la niña con personalidad tímida, retraída, nerviosa y callada. En el ámbito escolar falta de interés, vagancia (palabra típica en Costa Rica), que no presta atención en clases y que por eso se le dificulta aprender o en situaciones extremas que no es inteligente. Al hablar de las labores diarias del hogar, olvidadiza, que nunca acaba las labores que se le asignan, que pierde todo lo que se le da a guardar, entre otras.

Cuando se investiga acerca de la sintomatología en niñas se comprenden las palabras del autor Bauermeister (2014) cuando afirma que;

 “se ha documentado que las niñas con el TDAH corren riesgo de no ser identificadas y tratadas a tiempo, e incluso de no ser tratadas en lo absoluto” (p. 263). 

Lo anterior puede ser debido a que hay una diferencia entre ambos géneros en las características del trastorno, lo que puede ser la causa de que las niñas con TDAH pasen desapercibidas al mostrar un comportamiento pasivo, tranquilo e inatento, al contrario de los niños que en la mayoría de los casos son muy activos, hiperactivos e impulsivos.

Lo anterior puede originar que las niñas no sean identificadas y diagnosticadas a tiempo, lo que impide el tratamiento temprano, no obstante, se debe mencionar que lo anterior no es la regla, es necesario que los padres y profesionales indaguen en las diferentes razones que pueden dar origen a notas bajas, descuido en las labores escolares y cotidianas. Además, que no necesariamente un niño va a presentar una conducta hiperactiva, puede ser inatento y viceversa, una niña puede presentar una conducta hiperactiva.

 En ambos géneros la falta de diagnóstico y tratamiento trae consecuencias a largo plazo en la vida académica, personal y profesional, desde el punto de vista de Bauermeister (2014):

el impacto del TDAH en las personas es significativo y podría tener repercusiones significativas en personas del género femenino… ya que la sociedad asigna a las mujeres roles importantísimos en la crianza y formación de los hijos, así como el manejo de la vida familiar. (p. 263)

            Entonces, ¿qué significa lo expresado por el autor? La mayoría de las mujeres tienen que encargarse de las labores del hogar: preparación de comida, toma de decisiones familiares, pagos de servicios públicos, aseo del hogar, dar a los hijos medicamentos en horarios establecidos cuando hay alguna enfermedad, apoyar a sus hijos en las tareas escolares, por mencionar algunas actividades. Sin dejar de lado que muchas veces además de las tareas del hogar como las anteriores, la mujer debe laborar fuera del hogar y cumplir con su trabajo.

            Las personas se pueden preguntar ¿existen problemas a largo plazo con el TDAH en las mujeres? la respuesta es ¡sí! debido a que:

 todas estas tareas podrían verse gravemente impactadas por las dificultades en las funciones ejecutivas que pueden tener las personas con el TDAH, es decir, para recordar lo que hay que hacer, inhibir, autorregularse emocionalmente, automonitorearse, planificar, organizar, ser flexible e iniciar tareas o proyectos. (Bauermeister, 2014, p. 264) 

https://menteducablog.blogspot.com/2020/05/funciones-ejecutivas.html
Se puede decir que a las mujeres con TDAH se les va a dificultar cumplir con las actividades que debe ejecutar por diversas razones, por ejemplo, que olvide pagar los servicios públicos (teléfono, agua, electricidad), se le dificulte recordar los horarios en que debe dar el medicamento a su hijo, por mencionar algunas actividades del hogar. Si a estas actividades, le sumamos que trabaje fuera del hogar, dividir el tiempo en las actividades de la casa y del trabajo. Al leer lo que expone el autor se puede comprender que, para una mujer con TDAH, planificar, organizar las actividades, recordar todo lo que tiene hacer puede ser difícil y causa de frustración.  

Mi experiencia con el trastorno por déficit atencional e hiperactividad

Es interesante que, aunque hace varios años en edad adulta fui diagnosticada con el trastorno por déficit de atención e hiperactividad, hasta que leí este libro identifiqué muchas de las características propias del trastorno en mí, y al leer el capítulo que dedica este autor al trastorno en niñas, reconozco todas las dificultades que como mujer he pasado en diferentes etapas de mi vida, debido al diagnóstico tardío.

Sin embargo, les puedo decir que, aunque convivo todos los días con el TDAH he aprendido a sobrellevar cada una de las barreras que se me presentan hasta el punto de ser una mujer que logra organizar todas las labores diarias del hogar, de estudio y por supuesto trabajar en mi proyecto personal Menteducablog. Siempre siendo flexible y con apoyo de mi familia.

Con lo anterior lo que intento decir es que este diagnóstico sea temprano o tardío no es una sentencia, que por mi experiencia y la experiencia de muchas personas más es posible salir adelante, he aprendido estrategias para organizarme, concentrarme o prestar suficiente atención al realizar las actividades cotidianas y académicas, hasta el punto de ser estudiante de la Universidad Estatal a Distancia (UNED), también apoyar a mis dos hijos en las tareas escolares, sin olvidar recientemente apoyar a mi hijo en la educación a distancia debido a la pandemia.

Debo agradecer que a lo largo de mi vida he contado con profesionales en educación que me han apoyado en el área académica, profesionales conscientes que puedo trabajar, pero a mi ritmo.   

 Para concluir, insto a los padres de familia y profesionales en educación que indaguen todas las posibilidades cuando una niña presente alguna de las características citadas y/o un bajo rendimiento escolar, ya que puede ser una niña no diagnosticada con trastorno por déficit de atención e hiperactividad.

 

Lista de Referencias

Asociación Americana de Psiquiatría. ( 2013) . Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (5 ª ed.) . Recuperado de https://www.researchgate.net/publication/283296361_DSM-5_Diagnostic_and_Statistical_Manual_of_Mental_Disorders

Bauermeister, J.J. (2014). Hiperactivo, Impulsivo, Distraído ¿Me conoces? Tercera edición. Nueva York, Estados Unidos de América: The Guilford Press

Franquiz, F.I y Ramos, S. (2015). TDAH: Revisión teórica del concepto, diagnóstico, evaluación y tratamiento. (Trabajo de Fin de Grado de Psicología. Universidad de La Laguna). Recuperado de https://riull.ull.es/xmlui/bitstream/handle/915/3184/TDAH+Revision+teorica+del+concepto,+diagnostico,+evaluacion+y+tratamiento.pdf?sequence=1  

Mena, B., Nicolau, R., Salat, L., Tort, P., y Romero, B. (2006). Guía práctica para educadores. El alumno con TDAH. Trastorno por déficit de atención con o sin hiperactividad. 2 ª Edición. Recuperado de https://www.fundacionadana.org/wp-content/uploads/2016/12/libro_alumno_tdah_11_indd_1.pdf


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