El problema real de las pruebas FARO
Este artículo surge debido a la eliminación de las pruebas
FARO por parte del Ministerio de Educación Pública de Costa Rica, las cuales desde
su inicio han sido un tema de muchas controversia y preocupación para muchos
padres, madres y docentes. Sin embargo, me gustaría recalcar que estas no son
las únicas evaluaciones que los y las costarricenses han criticado. Por un
lado, podemos mencionar las que se utilizaban para evaluar los conocimientos de
los educandos en 6º, necesarias para aprobar el nivel de I y II Ciclo de
Educación Diversificada e ingresar al III Ciclo; así como las aplicadas en 9º
año de secundaria, indispensables para proseguir con los estudios secundarios
en la Educación Diversificada.
No se pueden dejar de mencionar, las odiadas pruebas de
bachillerato, por considerarse sumamente
difíciles, la aprobación de estas permitía a los y las estudiantes obtener el
título de Bachillerato en Educación Diversificada; indispensable para iniciar estudios
universitarios; debido a estas muchas personas vieron derrumbados sus sueños de
estudiar por tiempo indefinido, estas últimas fueron aplicadas por última vez en
el 2019 y sustituidas en el 2020 por las pruebas FARO. Las cuales, llegaron a
ser controversiales en el 2021 por el tiempo que tardaron los niños y niñas de
5º de escuela al resolver unos cuestionarios, por lo tanto, dicho cuestionario
no fue aplicado a los educandos de secundaria en los niveles respectivos según
el tipo de institución académico o técnico.
El factor que tienen en común las
evaluaciones mencionadas anteriormente es que son pruebas estandarizadas que
son diseñadas para determinar y medir los conocimientos que adquirieron los y
las estudiantes a lo largo de los diferentes niveles educativos.
¿Qué son pruebas estandarizadas?
Para entender porque tanto
problema al hablar de cualquiera de las pruebas utilizadas para evaluar o medir
los conocimientos en los educandos en los diferentes niveles educativos de
forma igualitaria se debe conocer qué son pruebas estandarizadas.
Las pruebas estandarizadas son aquellas que tienen su referencia en normas; comparan el desempeño de una persona con la de otra, o con el de un grupo.(Mora, 2014, p. 128)
En otras palabras, buscan medir con el mismo criterio los
conocimientos o habilidades de toda la población estudiantil del país que se
encuentre en el nivel que se aplique, sin considerar los contextos educativos
en los que se desenvuelven, condiciones en las que se imparten las lecciones,
características personales de cada uno de ellos y ellas. Esto se debe a que
este tipo de evaluaciones toman de referencia la similitud de las personas en
las diferentes etapas de la vida, todos los niños y niñas deben saber leer,
escribir, sumar y restar correctamente a los 10 años de edad; lo cual se
relaciona con el nivel educativo en que se encuentra en ese momento. Sin
considerar que en la adquisición de habilidades o el aprendizaje intervienen
muchos factores educativos, familiares y personales.
Para los que llegamos a conocer las dificultades que pueden
llegar -pasar los diferentes profesionales en educación en la zona rural o
urbano dependiendo del lugar en que se situé la institución, cantidad de
educandos en un aula, materiales disponibles para enseñar, infraestructura; los
factores familiares, que pueden a llegar a influir de manera positiva o
negativa, motivación, apoyo con actividades y tareas, entre otros. Puede ser difícil pensar que eso sea posible,
medir conocimientos o habilidades en todos los educandos del país con una
prueba estandarizada, elaborada por expertos según el currículo establecido.
No pretendo que tengan un mal concepto de estas pruebas, sean
FARO, Bachillerato, puedo afirmarles con mis conocimientos en educación que el
problema no es la prueba en sí, considerando que podían llegar a tener algunos
errores en redacción o de ambigüedad al final estos permitían apelaciones a
favor de los educandos que las resolvían. Lo que en realidad afecta es que con
este tipo pruebas se está pretendiendo evaluar los conocimientos o habilidades
en los y las estudiantes de todo el país de forma igualitaria, que, por motivos
personales, de institucionales o apoyos brindados en los diferentes procesos
educativos no recibieron la formación escolar o secundaria en las mismas condiciones.
Puede entrar en
discusión que los planes de estudio en todas las asignaturas son diseñados a
nivel nacional y deben seguirse obligatoriamente al pie de la letra en cada una
de las instituciones del país públicas y privadas. Por lo que cualquier prueba escrita,
aunque esta no sea hecha por el o la docente de grado de un nivel específico puede
ser resuelta por los estudiantes independientemente del lugar del país,
siempre y cuando cumplan con las
características establecidas (edad, nivel académico, entre otros).
Exceptuando a los y
las estudiantes que se les aplica una adecuación significativa por alguna
razón, a ellos y ellas se les confecciona una prueba en la institución
educativa de acuerdo con sus conocimientos, habilidades y nivel académico en
que se encuentren según el plan de estudios, sobre estas adecuaciones pueden
leer un poco más en el artículo dedicado a este tema.
No obstante, hoy en día se viven muchas dificultades a nivel
educativo, la pandemia provoco un rezago en los y las educandos del país por
falta de medios tecnológicos, materiales y personales. Además, con esta
situación se evidencio la brecha educativa que siempre ha existido, es bien conocido
que muchas escuelas en Costa Rica no cuentan con recursos para impartir
lecciones o que muchos niños, niñas y adolescentes no cuentan con el apoyo suficiente
en el hogar por diversas razones. Todos estos factores influyen de una u otra
forma en la aplicación y resolución de las pruebas estandarizadas en las instituciones.
Pero ¿Qué son las pruebas FARO? y ¿Cómo
pueden afectar la vida de los y las estudiantes?
Por un lado, el
significado de este acrónimo es Fortalecimiento de Aprendizajes para la
Renovación de Oportunidades (FARO), el cual designa a las pruebas
estandarizadas que se estaban aplicando en primaria y secundaria para evaluar
el dominio de habilidades para la vida en los educandos que cursaban los
niveles de 5º de primaria, con opción de repetir en 6º para mejorar la nota,
undécimo año de Educación Diversificada Académica y duodécimo año de la
Educación Diversificada Técnica.
Las pruebas
Faro, en su momento eran un requisito para la conclusión de estudios de I y II
Ciclos de la Educación General Básica y el título de Bachiller en Educación
Media sin tener una nota mínima de aprobación, lo que les permitía a todas las
personas estudiantes que las aplicaran pasar al siguiente nivel, no obstante, el
valor de estas era de un 40% en ambos niveles y un 60% al desempeño en las
asignaturas dándoles el poder de bajar el promedio final de los y las
estudiantes, esto afectaba a la mayoría de educandos, aunque obtuvieran ese
sesenta por ciento, si la calificación de las pruebas FARO era baja, por
ejemplo un 50, su porcentaje final sería de 80, esto bajaría automáticamente la
nota de presentación.
En que afectaría
un promedio final de 80, por un lado, hoy en día existen instituciones
secundarias públicas o privadas que exigen promedios elevados de 90 para
ingresar creando un filtro de calificaciones, por supuesto, algo en lo que no
estoy de acuerdo, todo estudiante que es apoyado puede alcanzar el máximo de su
potencial por lo que están dividiendo a las personas estudiantes en colocando
una parte en un nivel más bajo del real.
Para los y las
estudiantes de secundaria, debemos recordar, que este promedio es tomado en cuenta
para los exámenes de admisión de universidades públicas (Universidad de Costa
Rica(UCR), Universidad Nacional (UNA), tecnológico de Costa Rica (TEC) y
Universidad Técnica Nacional (UTN)), los cuales ya tienen un grado de
dificultad alto por lo que esta nota es de gran apoyo para la calificación
final.
Es decir, que,
aunque él o la estudiante aprobara la prueba y pasara al siguiente nivel, esta
tenía el mismo peso que las pruebas de bachillerato o aún más, con las
anteriores, le decían a él o ella, no paso, repita el examen, con estas la nota
se obtuvo y ya le afectó el promedio final en los colegios y escuelas el niño o
niña tenía dos oportunidades, pero, desde mi perspectiva, eso solo servía para
estresarlo o estresarla dos veces.
La preparación de
los y las estudiantes para estas pruebas
Las personas docentes
de los respectivos niveles tomaban un tiempo de antelación para preparar a sus
educandos para dichas pruebas con prácticas o simulacros de examen, pero,
debemos recordar que el rezago educativo no solo se refiere a los conocimientos
actuales que debe poseer una o un estudiante, también influyen habilidades como
el analizar, interpretar, pensamiento crítico, lectura consciente de los diferentes
ejercicios, aspectos en los que se viene trabajando desde tiempo atrás con la reestructuración
de las asignaturas. Sin embargo, dos años de educación a distancia o combinada en
la que se trabajó con guías autónomas impidieron que se estimularan adecuadamente
estas habilidades.
Otro punto muy
importante que no se debe dejar de mencionar son las características de los y
las estudiantes, pude llegar a observar y analizar prácticas de las distintas asignaturas
de primaria, y les puedo decir que son extremadamente largas y cuentan con
mucha información e imágenes, por así decirlo una persona estudiante en
cualquier nivel que presenta dificultades de aprendizaje de cualquier tipo
requiere de mucho mayor tiempo para leerlas, analizarlas y realizar
tranquilamente cada ejercicio, aunque este bien preparada o preparado. Ahora
bien, tengo claro que los apoyos educativos son aplicados en la ejecución de
estas pruebas a los y los estudiantes que los requieran, pero, se debe
comprender que muchas veces se necesita del criterio de un especialista
(psicopedagogo, psicólogo o psiquiatra) esto porque él o la docente, aunque
conozca a su educando no puede solicitarlos sin un diagnóstico previo.
Un aspecto por
considerar es que la extensión de estas pruebas puede llegar a afectar a
cualquier educando indistintamente que cuente con apoyos o no para su ejecución.
Todos en algún momento hemos llegado a ver una prueba escrita y hemos pensado, “no nos va a alcanzar el tiempo”. La
diferencia, es que en las personas adultas ya contamos con estrategias para la
resolución de exámenes: colocamos el nombre, leemos todo el examen, marcamos
las difíciles e iniciamos por las que sabemos y las otras las pensamos más.
Pero, la realidad es que en la niñez no recuerdo haber aplicado ninguna de esas,
la extensión de la prueba no solo depende de los conocimientos, sino de la
forma en que se resuelva esta.
¿Qué pasó con las
pruebas FARO?
Recientemente
el Ministerio de Educación Pública de Costa Rica (MEP) solicitó la cancelación
de estas al Consejo Superior de Educación. Esto como indique antes se debió a
que el país enfrentó un escenario educativo durante la Pandemia mundial por
Covid-19 en la que se destacó la brecha educativa de entre las instituciones
públicas y privadas; escuelas rurales y urbanas; los hogares con o sin
conectividad de internet o tecnologías de la comunicación.
Sin dejar de
lado, las dificultades de todas las personas docentes al realizar teletrabajo
el cual se les llego a dificultar por diversas razones, recordemos que mucha de
la población se pasó a esta modalidad lo que recargo el internet provocando
fallos en la red, además, al trabajar con GTA-Guías de trabajo Autónomo muchos
de los y las estudiantes tenían que trabajar en el hogar con poco o ningún
apoyo por parte de las y los docentes, padres y madres. Esto afectó a todas las
instituciones públicas y privadas en mayor o menor medida.
Aunque el año
pasado estas pruebas fueron aplicadas, los resultados mostraron que, hasta ese
momento, no se lograba que las y los estudiantes adquirirán las habilidades
propuestas por el MEP en los respectivos niveles. Los que se dividieron en 1 (bajo), 2 (medio) y 3 (alto), siendo
matemática y español los que exponían índices más bajos, resultados que no voy
a mostrar ya que no son relevantes para este artículo.
Cancelación de
las pruebas FARO
La cancelación
de las pruebas Faro trajo al país debate entre los y las profesionales en
educación, padres de familia, sobre qué tan necesaria es la aplicación de este
tipo de pruebas para la evaluación de los conocimientos o habilidades de los
educandos al concluir los diferentes programas educativos.
Siempre están
las personas que dicen, no son necesarias este tipo de pruebas para evaluar los
conocimientos o habilidades y los que dicen, que, sí son necesarias, que ya
fueron evaluadas en los distintos niveles.
Puedo decirles
que personalmente he resuelto diferentes pruebas estandarizadas a lo largo de mi
educación, las de 6º para finalizar el programa de I y II Ciclo de Educación
Diversificada; al sacar el III Ciclo Educación Diversificada a distancia me
tocó realizar las 7º, 8º, 9º para sacar cada uno de los niveles; y las tan
temidas y odiadas pruebas de Bachillerato, algunas de las asignaturas más de
una vez. Sin dejar de lado, que las utilizadas en la Universidad Estatal a
Distancia (UNED) son estandarizadas por ser aplicadas a todas los y las
estudiantes del país de cualquier asignatura de una carrera a cada una de las
personas que matriculan en la UNED se les proporciona el material (libros,
orientaciones) para unos centros universitarios tutorías no obligatorias, lo
que nos coloca en las mismas condiciones para la ejecución de estas.
Sin embargo,
las pruebas estandarizadas de 6º y 9º ya
habían sido eliminadas en el 2007 y 2008
respectivamente, por diversas razones entre estas estaban que no evaluaban
adecuadamente los aprendizajes en los y las estudiantes, las únicas que se
mantenían eran las de Bachillerato de Educación Media, que fueron remplazadas
por las pruebas FARO. Otras que se mantienen son las aplicadas a las personas
que realizan los estudios de secundaria a distancia o por madurez como en mi
caso.
Aunque estas
se cancelaron, no se descartó la idea por parte del MEP de aplicar en 2023 las pruebas
estandarizadas a las personas estudiantes en los niveles de 6 grado de las
escuelas y 5 grado de los colegios que no serían puntuadas, la única función de
estas va a ser realizar diagnósticos de la situación educativa. Desde mi punto
de vista, el único cambio sería que no tuvieran valor en el porcentaje final,
para toda persona que fue estudiante y tuvo que realizar alguna prueba en la
niñez o adolescencia como las llamadas popularmente de sexto grado o
bachillerato, sabe lo estresante que es pensar en que hay exámenes en lo que
usted debe demostrar sus conocimientos o habilidades con este tipo de pruebas
que únicamente logran estresar a los y las estudiantes al aprender, sin dejar
de lado que le confiere a los educandos la responsabilidad de la educación del
país.
Lo anterior
significa que la enseñanza coloca todo el peso de la educación en las y los educandos,
y se olvida que muchas veces las bajas calificaciones o falta de adquisición de
habilidades en las áreas académicas que repercuten para la vida son el reflejo
de las deficiencias en el sistema educativo, instituciones, personas que apoyan
la labor educativa, entre muchas más.
Al final, las
pruebas estandarizadas ya sean para diagnostico o evaluación no miden los
conocimientos y habilidades de la población estudiantil, miden el reflejo de la
enseñanza de Costa Rica desde el currículo educativo que se imparte, hasta los
profesionales en educación que enseñan a cada uno de los y las estudiantes, olvidando
y dejando de lado que no todos cuentan con las mismas condiciones al impartirla
y recibirla.
Tal vez si en
Costa Rica se contara con una educación uniforme a lo largo del país, en el que
todas las personas contaran con los mismos recursos materiales, tecnológicos y
personales, e inclusiva en la que todos los y las estudiantes tuvieran
formación de acuerdo con sus características no hubiera necesidad de pensar en
pruebas estandarizadas para medir conocimientos o habilidades esto se reflejaría
de diferentes formas.
Por otro lado,
la educación no debe enforcarse en medir
los conocimientos o habilidades de forma igualitaria, sino en enseñar de
acuerdo con las características de cada individuo que asiste a las diferentes
instituciones educativas utilizando indicadores que muestren el desarrollo de estas.
Destaco, que la educación de Costa Rica se está estructurando para que se
enseñe y evalué considerando las peculiaridades de cada educando, por lo que se
espera que en un futuro no se considere que la única forma de valorar los conocimientos
es por medio de pruebas escritas.
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Lista de
Referencias
Mora, L. (2014). Evaluación diagnóstica en
la atención de estudiantes con
necesidades educativas. Editorial Universidad Estatal a Distancia.
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