Andrew siente ansiedad por romper su rutina de regreso a casa

Tercera ley de Newton “para cada acción hay una reacción igual y en el sentido opuesto”.

Andrew es un niño lleno de energía, esa es una de las razones por la que él y su mamá regresan  caminando todos los días del colegio a la casa. Además, es una de las partes más divertidas para ambos. Ya que  siempre recorren el mismo trayecto de regreso a casa, ven las mismas tiendas a las que algunas veces entran y disfrutan del canto de los pájaros. Los dos han creado una rutina muy tranquila que les permite desestresarse. 


Un día la mamá de Andrew quería ir a comprar un libro a la ciudad, al salir de la casa vio que la tarde estaba bonita con poco sol y corría una brisa fresca, por lo que  pensó: voy a recoger a Andrew al colegio y vamos a comprarlo, así aprovechamos que la tarde está hermosa. También, al salir con Andrew a otro lado nos cambia un poco la rutina de regresar a casa, que siempre es la misma para ambos.


En ese momento ella pensó que era una buena idea cambiar esa rutina, sin embargo, Andrew no creyó que hacer ese cambio fuera una buena idea como veremos a continuación.


Al llegar al colegio ya Andrew venía para afuera. Como de costumbre, él primero le dio un beso en la mejilla y luego la saludó:


—Mua. ¡Hola mamá!, ¿Cómo está?

—¡Bien, mi amor! ¿Cómo le fue hoy? —respondió ella devolviéndole el beso.

—¡Bien! —expresó él.


Luego ella le dijo: —Vamos necesito que nos apuremos, para ir a hacer un mandado a la ciudad.


Andrew al escuchar a su mamá decir esto de inmediato pensó, no vamos a ir por el camino de siempre, vamos a hacer otra cosa.  Mientras que sintió que su corazón empezó a latir rápido y fuerte como un tambor, hasta el punto de pensar que todos lo podían escuchar, a la vez  por su frente bajaban gotas de sudor frías como el hielo, su piel se tornó de un blanco como el de las nubes del cielo. Entonces con la voz agitada ya que el aire salía y entraba muy rápido por su nariz le preguntó a su mamá:   


—Aahhh¿A dón -aahh- de? aahh yyy  aahh¿Por ahh qué? 


Ella lo observó un poco pálido y le respondió: —Quiero comprar un libro. ¿Por qué? ¿Qué le pasa?


Él intentó controlar su respiración y alargando  las dos primeras palabras le replicó: —Peroooo, pooorque no lo puede hacer después de que llegamos a la casa.


—No, porque tendría que ir a la casa y volver. — le dijo ella —. Luego añadió, —mientras que ahora podemos subir y después ir a la casa, ahorrando tiempo.


 Andrew le replicó casi gritando: 

—Pero, no vamos a ir por el mismo camino de siempre a la casa.


Ella lo observó alterado, también más pálido que antes y ya preocupada trató de calmarlo: 


—Espere, primero respire tres veces profundamente.  Andrew tomó aire por su nariz.  Cuando ella vio que él parecía tranquilo  le preguntó —¿Cuál es el problema? ¿Por qué no podemos ir por otro camino? 


Andrew volvió a tomar aire una, dos, tres, cuatro, cinco, seis y más veces casi hiperventilado, ya que al escuchar las preguntas sintió de nuevo que no podía controlar su respiración, mientras se limpiaba las gotas de sudor que iban humedeciendo su frente. 


Su mamá un poco impaciente lo miraba y esperaba la respuesta. Después de unos minutos Andrew se calmó, su color de piel se tornó un poco más natural y le respondió:

 

—Pero, siempre vamos por el mismo lugar. ¿Por qué hoy, no?

—Porque no es necesario ir por el mismo camino a la casa. — Le dijo ella.


Andrew la escuchó y volvió a sentir su corazón acelerado, mientras que por su mente pasaban incontables escenarios de trágicos acontecimientos que podían suceder por no ir por el mismo camino. Ya que para él ir por otro lugar le hacía sentir inseguro, después de todo ese era su camino habitual en el que sabía lo que podía suceder. Tantos pensamientos lo impulsaron y gritar a su mamá:


—Sííí, sí es necesario, —también agregó. —Yo quiero ir por el mismo camino, no quiero ir por otro diferente, no es necesario cambiarlo. 

    Al ver que Andrew estaba alterado, ella tomó aire de manera profunda antes de perder el control. Luego le dijo:

     —¿Por qué no quiere ir por otro lado?

    Él al ver que su mamá le hablaba de manera tranquila respiro tres veces antes de responder lo siguiente —Puede pasar algo por no ir por el mismo de siempre, me siento seguro por el camino que ya conozco  y si vamos por otro no es igual, me da miedo no saber. —Luego enumeró una a una sus preocupaciones: 


—Cómo es. —dijo primero y prosiguió— dónde se deben cruzar las calles, por qué lugares vamos a pasar, qué personas nos podemos encontrar.


Ella pensó: pasa algo, ¿por qué?  no entendía cuál era el problema de Andrew:


—Pero, podemos ir a la ciudad para hacer el mandado, no va a suceder nada porque lo hagamos. No entiendo cúal es el problema. 


A lo que él expresó, —Yo pienso que sí nos puede pasar algo, por no hacer las cosas como siempre. 


Con esta frase la mamá de Andrew comprendió lo qué sucedía. Las personas dentro del espectro autista no comprenden el mundo que les rodea por eso es habitual que creen rutinas estrictas para hacer algunas actividades, es difícil para ellos anticipar qué puede suceder si hay un cambio lo que les produce ansiedad extrema. Andrew estaba sintiendo una crisis de ansiedad.


Las rutinas los hace sentirse seguros y reduce los niveles de ansiedad, porque ya tienen claro lo que puede suceder. La mamá de Andrew sin darse cuenta al tomar todos los días el mismo camino a casa le creó una rutina segura para volver en la que él sabía que sucedía a cada momento. Cambiar esa rutina de un momento a otro asustó a Andrew y le produjo estrés y  ansiedad, él ya no sabía que podía suceder si tomaban otro camino a casa. 


Ese día la mamá de Andrew fue flexible a los sentimientos de preocupación que él expresó y regresaron por el mismo camino a casa. Así también aprovecho para explicarle que es normal sentir inseguridad cuando se cambia algo, pero que el cambio no está mal. Ese día ambos decidieron que en adelante seguirán regresando a casa por otros caminos y utilizando diferentes transportes públicos, aunque sea difícil para él.


Crear rutinas no está mal, es importante para que las personas con TEA se sientan seguras. Sin embargo, es necesario enseñarles a romperlas cuando se requiere, la rigidez de no querer cambiar algo  puede afectar las relaciones con los demás, ya que muchas personas no conocen sobre el tema y porque alguien con autismo siempre quiere hacer todo de la misma manera, le sucedió a la mamá de Andrew por no recordar que su hijo a pesar de no ser tan rígido en sus rutinas tenía una establecida que no quería cambiar, debido a que sentía inseguridad de lo que podría ocurrir.     


Termino recordándoles de nuevo la tercera ley de Newton: "Para cada acción hay una reacción igual en el sentido opuesto" nuestras acciones o palabras tienen el poder de impulsar a una persona de forma positiva o negativa, siempre busquemos hacer el bien.  


 

   

       


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